martes, 3 de junio de 2008

Leves síntomas de agotamiento (Fay Grim)

Se estrena en España --con dos años de retraso-- Fay Grim (2006), la segunda parte de la aclamada Henry Fool (1997), para muchos la mejor película hasta la fecha --después de Amateur (1994)-- de la filmografía de Hal Hartley. En ella se cuentan las andanzas de Fay, la esposa de Henry, a quien gobiernos de medio mundo persiguen, manipulan y acosan debido a unos comprometedores cuadernos que por lo visto escribió su desaparecido marido.

Confieso que entré en la sala completamente dividido en cuanto a expectativas: el avance me pareció espectacular, a lo que había que añadir las ganas que tenía de ver una película suya. Sin embargo, luego leí la crítica de Javier Ocaña y se enfrió buena parte de mi entusiasmo. Es cierto que no podemos esperar de Hartley (ni de nadie) que nos sorprenda siempre a base del mismo extraño equilibrio entre lo simple, lo raro y lo divertido (hábil mezcla que le ha hecho famoso), no sólo porque es una receta muy difícil de ligar sino porque las posibilidades de combinación de los tres elementos no ofrecen tantas variantes. Ya le pasó a Jim Jarmusch en Flores rotas (2005) y seguramente le pasará a Wes Anderson. Lo único que podemos esperar es que suceda tarde, muy tarde.



De modo que en el caso de Hartley puede que ese momento haya llegado y, sin que debamos considerarlo en fase crítica, comprendemos por ciertos detalles de estilo y de tratamiento que lo mejor ya ha pasado (la frescura, la audacia, la transgresión...). Aun así Fay Grim posee suficientes elementos que permiten salvar los muebles: el más importante el guión (endiabladamente complicado por voluntad propia), a pesar de que en determinados momentos eclipsa de tal manera a los personajes y los diálogos que se hace difícil reconocer las señas de identidad del mejor Hartley. Para compensar, Fay Grim ofrece brillantes destellos que nos devuelven la normalidad deforme del universo de su director: cuando Fay se mete en las braguitas el móvil en modo vibración y no puede atender las insistentes llamadas de una agente israelí, provocando una cadena de malentendidos muy divertidos; o el tono atropellado y falso de Goldblum cuando decide confesar secretos de Henry Fool, de la política exterior de su país o de su triste vida como agente de la CIA.

Fay Grim no es una parodia de las películas de espías, más bien un ejemplo del buen uso de la narración tensa, misteriosa y alocada que exhiben las historias que en ellas se cuentan. Estoy convencido de que si analizamos la coherencia del guión encontraremos todo tipo de lagunas y contradicciones, pero eso es lo de menos, lo importante es ver a Fay desenvolverse con desparpajo y un sentido común envidiable en el absurdo mundo, lleno de mentiras y dobleces, de los agentes secretos. Además, un guión sobre intrigas de espionaje permiten a Hartley aprovechar una serie de situaciones dramáticas que le vienen como anillo al dedo a su estilo y a su manera de contar historias, dejando asomar lo cotidiano y lo surreal en "supuestas" situaciones límite: la búsqueda de la persona amada, encuentros fugaces con todo tipo de personas (zumbadas, fanáticas, ingenuas), incluso presentarse ante la mismísima encarnación del diablo en su versión laico-occidental (un clarísimo alter ego de Bin Laden). No es sólo lo que cuenta, aunque tampoco únicamente cómo lo cuenta; siempre queda la sensación de que falta algo que no se explica. Así es el cine de Hal Hartley.

Para acabar de decantar la balanza del lado bueno y contrarrestar los desaciertos menores (visibles sólo para los fans), está Parker Posey --actriz fetiche de Hartley que ahora admiraremos juntos-- borrando con su expresividad y sus comentarios de profana toda la trascendencia que tratan de imponerle quienes la rodean (para bien o para mal). Eso y el indudable morbo que desprende, razón por la cual estoy pensando en nombrarla mi fetiche del semestre, en dura pugna con Marisa Tomei. La próxima película de cada una acabará de decidirme.

7 comentarios:

Goethemola dijo...

Me sorprendió gratamente, la verdad, aunque el tramo final se me atragantó mucho, quizá por el cambio de ritmo.

La cajita con el mensaje en la orgía me pareció de lo mejor, con todas las situaciones que ésta conllevaba.

Un saludete!

Sesión discontinua dijo...

goethemola: gracias por recirdarme lo de la cajita, sólo con los comentarios que hacían de ella me partía... En cuanto al desnecanto final déjame que te ofrezca una manera de venderla con este argumento: "Una mujer que no se entera de nada busca a su desaparecido marido-espía, y tan a fondo busca que acaba frente al mismísimo Bil Laden". Yo creo que así resulta mucho más atractiva... No crees?. Lo que no consiga una mujer cabezota....

Nos leemos!!!!

Goethemola dijo...

'Lo que no consiga una mujer cabezota....'

Te diré direte.

XXXXXXXXXD

Anónimo dijo...

Esta quiero ir a verla, a ver si puedo este fin de semana.. luego está más dificil. Diez años de Hartley en el dique seco desde Henry Fool (creo), pues habrá que verla..
Por lo que leo aquí (y también en otros sitios) no está a la altura de su última película, aunque este director casi siempre sorprende, a pesar de que pueda (como dices) no estar en su mejor momento.
Da la sensación, sin haberla visto, de ser un acercamiento al thriller al que ha añadido sus elementos propios.. tan indie él je je

La veré, y ya te diré..
Saludos!

Sesión discontinua dijo...

babel: si eres fan de Hartley sólo quedarás un poquito defraudada, si no lo eres mucho quizá te sorprenda, y si no le conoces de nada pues es un misterio como reaccionarás....

Como creo que eres del grupo 1 creo que lo pasarás bien. Ya me contarás...

Espero tu post!!!

Anónimo dijo...

Vista la película y, francamente, decepcionada. Fan de Hartley? No especialmente, pero me gustó mucho Henry Fool, y de su secuela esperaba algo más. Reconozco que me he reido y que no es del todo para echarla a la papelera, pero se me ha hecho pesada y embrollada, sin necesidad de ello para contar lo que cuenta.
Cierto, en Hartley lo importante no es lo que cuenta, sino cómo lo cuenta.. pero eso era antes. En esta peli se centró en la crítica ácida y.. la cagó (mi opinión, claro está)
Añadir que Parkey Posey no me parece estar en su mejor momento.. Vamos, que la veo más empanada que otra cosa en casi toda la película, y enfrentándose a las situaciones cómicas me recordó (siento decirlo así..) a los momentos más álgidos de Lina Morgan.
¿No será que te cautivó demasiado la fachada de la chica..? je, je...
Bien, es sólo una opinión..
saludos!

Sesión discontinua dijo...

babel: veo que me has calado con lo de la Posey... jejejeje. Y aunque en verdad no es el mejor Hartley al menos es un cine irónico que rompe con los topicazos.... qué le vamos a hacer... Eso sí, en lo de Lina Morgan "te has pasao" jajajajaj!!!!


Nos leemos!!!!!